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Martes 11 de enero de 2011

Alejandra Guzmán amenizó narcofiesta

En la celebración realizada en Tamaulipas también participaron Los Tucanes de Tijuana


En la celebración realizada en Tamaulipas también participaron Los Tucanes de Tijuana

Distrito Federal— La cantante Alejandra Guzmán fue “La Reina de Corazones” durante una narcoposada organizada por el líder de ‘Los Zetas’ en diciembre de 2006.

Así lo establece la declaración de un ex sicario que hoy es testigo protegido de la PGR y quien señaló que el evento, organizado en Río Bravo, Tamaulipas, también habría sido amenizado por Los Tucanes de Tijuana.

“Se concentró todo el personal que andábamos en las plazas más calientes o que estaban en guerra, en ese convivio mandaron traer o llegaron a la fiesta prostitutas de Monterrey y también había bebidas variadas, cerveza, tequila, entre otras y grupos musicales como Los Tucanes de Tijuana y Alejandra Guzmán, entre otros eventos ese mismo día”, relató.

En la reunión, organizada por Heriberto Lazcano Lazcano, “El Verdugo”, líder del grupo criminal anteriormente ligado al Cártel del Golfo, habrían sido rifadas casas, droga y vehículos último modelo.

Además, Lazcano leyó a los asistentes una carta del capo Osiel Cárdenas Guillén, quien se encontraba preso en el Penal del Altiplano, en el Estado de México, de donde sería extraditado a Estados Unidos aproximadamente un mes más tarde.

“La primera reunión fue donde Heriberto Lazcano leyó una carta de Osiel y donde se hicieron rifas, donde hubo bebida, cerveza y whiskey para las personas que quisieran; al siguiente día, fue una reunión donde se le dio de comer a todo el personal que asistió carne asada y de igual forma había bebidas alcohólicas y drogas.

“Esto se llevó a cabo en la unidad deportiva o parque conocido dentro de la organización como ‘Las Liebres’ en Río Bravo, Tamaulipas, para pasar posteriormente ese mismo día a un salón de fiestas que se ubica en la entrada hacia el pueblo de Río Bravo, viniendo de Reynosa por la calle principal y se encuentra ubicado a un lado del restaurante ‘El Sombrero’, lugar donde se concentró todo el personal que andábamos en las plazas más calientes o que estaban en guerra”, relató.