Asesinan a otro jefe policiaco

El director de Seguridad Pública del central estado de Hidalgo, Marcos Manuel Souverbille, fue asesinado hoy por desconocidos cuando circulaba abordo de una camioneta en compañía de un amigo empresario, que resultó gravemente herido.

El ataque ocurrió en el poblado de Ocotillos sobre la carretera Pachuca-Huasca de Ocampo, a unos 20 minutos de Pachuca, capital del estado, ciudad ubicada a 59 kilómetros al norte de Ciudad de México.

Al momento del atentado, Souverbille conducía una camioneta color blanca de su propiedad, indicó la Procuraduría General de Justicia del Estado en un comunicado.

En el lugar de los hechos las autoridades encontraron 20 casquillos "probablemente de calibres 223 y 9 milímetros", destaca la nota.

El empresario Mario Covarrubias Melo, dedicado al área de las telecomunicaciones y que acompañaba al funcionario, fue traslado con heridas de bala al Hospital de la Beneficencia Española, en donde recibe atención médica.

Policías ministeriales, estatales y municipales se encuentran rastreando el paradero del vehículo, de donde según testigos, partieron los disparos de armas de fuego.

Souverbille, de 56 años y abogado de profesión, se había desempeñado como director de la Policía del estado desde 2005.

Su currículum destaca su interés por la lectura y la natación.

El embajador de Estados Unidos en México, Antonio Garza, se mostró hoy "entristecido" por la muerte del jefe policíaco.

En un comunicado, Garza manifestó que Souberville es "otra víctima más de la lucha de México contra el crimen organizado".

El diplomático envió sus condolencias a los familiares y amigos del funcionario y sostuvo que a pesar de su trágica muerte, los gobiernos de México y EE.UU. "permanecen comprometidos en esta batalla compartida. La lucha continuará".

Este es el segundo director de policía de un estado mexicano que muere en la última semana, ya que el pasado día 13, también fue asesinado el titular de Seguridad Pública del central estado mexicano de San Luis Potosí, Jaime Flores Escamilla.

Según datos del gobierno mexicano, entre enero y agosto del presente año han muerto 1.950 personas como consecuencia del crimen organizado, que afecta principalmente al norte y sur del país.