Catafixia en el PRI enfurece a bases; Duarte es quien manda

Aunque el PRI ha tejido fino durante su proceso para elegir candidatos a Gobernador, en la figura del ex alcalde de Ciudad Juárez, Enrique Serrano y a las alcaldías de Chihuahua y Ciudad Juárez, con Lucia Chavira y Hector Murguia, las cosas no están como aparentan.

Los que suspiraban con la candidatura a Gobernador, entre quienes destacan, el mismo Héctor Murguía, Marco Quezada, la supuesta puntera "Chela" Ortíz, Lilia Merodio y el ahora coordinador de campaña de Serrano, Javier Garfío, andan haciendo berrinche por lo descuadrado en que quedó el orden político.

Ya ni se diga a los que nunca pelaron en la contienda, como Marcelo González Tachiquin y Víctor Valencia de los Santos, quienes desde el inició fueron relegados a un tercer término, ni siquiera les dieron información e indicios de lo que iba a suceder y al final se llevaron el chasco de su vida.

Las razones de la molestia para los ex suspirantes y hoy seguidores de Enrique Serrano, son muy sencillas, el candidato fue electo por el Gobernador Cesar Duarte, lo que implica mantener a sus grupos de trabajo en la banca durante los próximos seis años más, en caso de que gane el PRI o cualquier otro candidato.

Porque? las razones son sencillas, el grupo que encabeza el actual gobernador se impuso y con su candidato a la cabeza, es quien determinó que Lucia Chavira fuera por Chihuahua a pesar de que Pedro Domínguez Jr. encabezaba las preferencias, para quitarse de encima a Marco Quezada, pero a sabiendas de que ya viene un candidato fuerte a la alcaldía en el empresario Enrique Terrazas, para quien no tendrían empacho en entregar la "joya de la corona", o sea Chihuahua, ya que al final de cuentas no sería para el PAN.

Por esta razón, Marco Quezada trae un sabor agridulce, ya que por un lado le dan la candidatura a su esposa, casi para perderla con Terrazas y por el otro de plano deja atrás el tema del Aeroshow con el que tanto habían amenazado al ex alcalde de Chihuahua, incluso señalando que iría hasta el botellon por su responsabilidad en el accidente.

Para el "teto" Murguia. baqueton como es, tampoco vino en gracia la catafixia, ya que es ridículo que vuelva a ser, por tercera ocasión, candidato a Presidente Municipal en Juárez y el lo sabe, sin duda de eso a nada pues eso, sin embargo no esta nada contento ya que por su edad y los tiempos políticos, este volvía a ser su momento para la gobernatura y de aquí en adelante lo más seguro es que ya no se vuelva a repetir.

Obvio es que "Chela" Ortíz ya se sentía en la candidatura, por lo tanto la catafixia fue como un valde de agua fría, generando la molestia al grado de que su equipo asegura que no va a trabajar con Serrano ni con Duarte, a quienes acusan de haberlos engañado todo este tiempo.

Javier Garfio no tiene ningún problema, ya que es del equipo del gran ganador que es el Gobernador Cesar Duarte, sin embargo si piensa en lo difícil que le va a resultar buscar ganar la candidatura, con una candidata como Lucia Chavira en Chihuahua, ya que no le garantizaría los votos suficientes, menos si la idea es entregarle a Enrique Terrazas.

Finalmente Lilia Merodio se divirtió y ella si tiene chance de recuperar el tiempo, es joven y apenas empieza, en tanto Marcelo González y Víctor Valencia, terminaron huerfanitos y tendrán que acercarse al Gober para retomar el camino, no les queda de otra pues, que llegar al Cesar.

El panorama esta abierto, se esperan reacciones los próximos días y el caldo puede salir más caro que las albondigas para el PRI, aunque también se pone a prueba el temple de un partido que se había comprometido a una elección democrática y termina, como siempre, con un dedazo.