Chihuahua la "capital del crimen"

El asesinato de 18 jóvenes internados en un centro de rehabilitación para drogadictos es la peor masacre en una entidad donde las ejecuciones masivas no son desconocidas.

Ayer, el número de víctimas del centro “El Aliviane”, aumentó a 18, luego que uno de los heridos falleció mientras estaba hospitalizado; aún se atiende a dos heridos de bala.

Así, el fusilamiento de Ciudad Juárez —donde han ejecutado a más de mil 400 personas en 2009— es el más grande por el número de muertos en un solo ataque, aunque hay otros crímenes de gran impacto no sólo en Chihuahua, sino en todo el país.

En agosto de 2008, en la comunidad de Creel, en plena sierra Tarahumara, fueron masacradas 13 personas.

Después, el 7 de octubre del mismo año, en el Bar Río Rosas asesinaron a 11 personas, y el 7 de julio de este año mataron a dos hombres de la familia LeBaron, Benjamín y su cuñado Luis Carlos Widman, por oponerse a pagar el rescate de un secuestrado.

En el Congreso de Chihuahua se pidió ayer que la investigación de estas masacres y asesinatos de impacto social realizados por los cárteles de la droga sean investigados por un grupo especial que sólo reporte sus acciones a la Presidencia de la República, para evitar filtraciones y pitazos.