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Lunes 5 de septiembre de 2011

Declara dueño del Royale temer por su vida

Raúl Rocha Cantú reveló desde el exilio, que teme por su vida y que está dispuesto a declarar si las autoridades le garantizan seguridad


Raúl Rocha Cantú reveló desde el exilio, que teme por su vida y que está dispuesto a declarar si las autoridades le garantizan seguridad

Monterrey.- Raúl Rocha Cantú, dueño del Casino Royale de Monterrey, reveló desde el exilio, que teme por su vida y que está dispuesto a declarar si las autoridades mexicanas le garantizan seguridad.

En una carta enviada a un medio nacional, el empresario, dueño de la casa de apuestas aseguró que nunca ha participado en actividades ilícitas, que su negocio estaba legalmente en regla y que operaba certificado por las normas de Protección Civil.

En el escrito, que ostenta su firma, Rocha Catú, se identificó como accionista de la empresa operadora Casino Royale, en éste, pidió una disculpa por el incendio causado por la delincuencia organizada, que dejó 52 víctimas.

"Ofrezco una sincera disculpa a todos.

"Las razones que me llevaron a salir del país antes de que se emitiera cualquier orden de presentación y realizando (...)

“los trámites ante Migración son fáciles de entender: el temor fundado de que atentaran en contra de mi vida", expuso Rocha Cantú.

En el documento, el empresario no señaló las causas del "temor fundado" de ser atacado ni por quién. Ni aclara en qué ciudad o país se encuentra.

"Como la realidad ha demostrado, nada ni nadie puede ofrecer una protección suficiente ante las acciones de sujetos como éstos", agregó en la carta.

Raúl Rocha, afirmó que está en plena disposición a presentarse ante las autoridades y dar información cuando ya no tema por su vida.

"Estoy dispuesto a rendir mi declaración cuando las autoridades me garanticen que mi vida no corre peligro.

"Estoy dispuesto a aportar toda la información que se requiera y a comparecer cuando se disipen los temores que ahora tengo sobre mi persona.

"Yo también soy una víctima de estos hechos criminales", declaró.

El propietario de la casa de apuestas, no formuó ninguna hipótesis del móvil del crimen, pero reiteró que el Royale cumplía con los lineamientos de Protección Civil, su versión contrasta con las de testigos y la del Cuerpo de Bomberos de Nuevo León.

La información que proporcionó el Cuerpo de Bomberos, la casa de apuestas no contaba con suficientes medidas de seguridad, pues una salida de emergencia era falsa y carecía de detectores de humo y rociadores de agua, aunado a que los empleados no estaban capacitados para contingencias.

En la carta Rocha aseguró tener más de 20 años de actividad productiva y haber actuado responsablemente con las familias de los empleados fallecidos y contar con una póliza de seguro con cobertura total de responsabilidad civil.

Aunque no aclaró si la póliza de responsabilidad civil cubre a las víctimas que eran clientes. De las 52 víctimas, 13 eran empleados; el resto, clientes.