El vació de poder hace estragos; la sucesión complicadísima

Más allá de los padecimientos que han mantenido al Gobernador del Estado, Cesar Duarte, fuera de actividad en el último mes, incluyendo el no haber participado en la presentación de su informe, en Chihuahua se evidencia un vació de poder, por lo menos al interior del Gobierno del Estado.

Los funcionarios de primero y segundo nivel han empezado a hacer estragos y a dejar de atender situaciones prioritarias para la ciudadanía, como es el caso hoy de la manifestación de estudiantes de la Normal de Saucillo, las cuales se quejan de falta de atención, simple y llana falta de atención, o sea nadie les atiende en Gobierno del Estado.

En definitiva esto es un vació de poder, al igual que lo que ocurrió con los vecinos de Quintas Carolinas, quienes hoy se quejaron de malos olores en su sector, debido a problemas con los colectores de aguas negras y a la tardanza en atender el problema.

Otro aspecto del vació de poder es que nadie esta atendiendo, o por lo menos no hubo manifestación al respecto, sobre el caso de la ampliación de denuncia en contra de Gobierno del Estado y del gobernador, por parte de los concesionarios de transporte público, quienes siguen quejando de lo que ha sucedido desde la instalación del Vivebus en Chihuahua y ahora piden juicio político, calificado como vacilada en el Congreso del Estado.

En fin las broncas saltan a diario y el vació ahí esta, mientras al interior del PRI el momento se aprovecha para achacarle a Cesar Duarte las propias y las de los demás, con el fin de que no tenga vela en el entierro de la sucesión, lo que significaría la sepultura política para sus alfiles Javier Garfio, Alcalde de Chihuahua y Enrique Serrano de Ciudad Juárez.

Por cierto al alcalde fronterizo al parecer ya le perdonaron la muerte y los heridos en las Dunas de Samalayuca, durante un evento autorizado por el municipio.

Suertudo el hombre, puesto que Marco Quezada sigue viviendo las de caín con los constantes ataques del Gobierno del Estado y la dirigencia del PRI, quienes quieren verlo de plano en el bote, antes de que llegue a ser candidato a Gobernador.