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Jueves 10 de septiembre de 2009

Es el narco asunto global: ONU

Ban Ki-moon, reconoció los esfuerzos del Gobierno de Felipe Calderón para luchar contra el crimen organizado y el narcotráfico


Ban Ki-moon, reconoció los esfuerzos del Gobierno de Felipe Calderón para luchar contra el crimen organizado y el narcotráfico

El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, reconoció los esfuerzos del Gobierno del Presidente Felipe Calderón para luchar contra el crimen organizado y el narcotráfico, pero destacó que derrotar a ambos debe ser parte de un esfuerzo regional y global.

El funcionario también urgió a la comunidad internacional a darle prioridad al combate del tráfico de armas ligeras, actividad que, junto al crimen organizado y el narcotráfico, obliga a los Estados como el mexicano a consumir recursos económicos vitales, que deberían utilizarse en estos tiempos de crisis en asuntos urgentes como el desarrollo social.

El diplomático surcoreano visitó México el 8 y 9 de septiembre para inaugurar la 62 Conferencia de Organizaciones no Gubernamentales y la ONU sobre Paz y Desarrollo.

Ban destacó el papel de México como promotor del Tratado de Tlatelolco, mediante el cual se declaró a América Latina región libre de armas nucleares y se mostró optimista por los recientes anuncios realizados por Rusia y Estados Unidos, las más grandes potencias atómicas, de que planean nuevos recortes a sus arsenales.

"Percibimos una alentadora tendencia (a favor reducir las armas nucleares). Debemos aprovechar la oportunidad", destacó, reiterando que la meta de la ONU sigue siendo la erradicación total de la amenaza atómica.

El Presidente estadounidense, Barack Obama, y su homólogo ruso, Dimitri Medvedev, han reactivado las negociaciones de desarme nuclear, ¿estamos más cerca de eliminar el armamento atómico?

Desafortunadamente, durante la última década o dos décadas se avanzó poco en el tema del desarme nuclear, pero hoy estamos viendo un avance muy positivo.

Los Presidentes de Estados Unidos y Rusia alcanzaron en julio un acuerdo para renovar el tratado START, que vence en diciembre; también le damos la bienvenida a su compromiso para reducir sus arsenales nucleares en el rango de mil 500 y mil 675 armas atómicas.

Si estas iniciativas tienen éxito, tendrá a su vez un impacto significativo en el resultado de las discusiones el año próximo de la revisión del Tratado de no Proliferación Nuclear.

Esta semana el Gobierno de Brasil anunció su interés en comprar una treintena de aviones de combate franceses, mientras el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, visita Rusia, un aliado que le ha vendido miles de millones de dólares en armamento. ¿Son estas señales de una creciente carrera armamentista en América Latina?

He leído estos reportes que pueden crear cierta desconfianza entre los países de la región. Por tanto, hago un llamado a las naciones de la zona para que discutan estos asuntos.

América Latina tiene un largo y sólido historial sobre su capacidad para abordar estos temas de manera armoniosa en beneficio de la paz y la seguridad regionales. La ONU también es un foro que permite este tipo de discusión sobre armamento convencional de forma transparente.

¿Tiene la Administración Obama una mejor disposición para luchar contra el flujo ilícito de armas ligeras a México, en comparación con sus predecesores?

Cuando el Presidente Obama y la Secretaria de Estado, Hillary Clinton, visitaron México en fecha reciente discutieron este asunto muy seriamente con el Presidente Calderón.

Atacar la violencia generada por este armamento, así como por el crimen organizado y el narcotráfico es un asunto muy serio, que no sólo el Gobierno mexicano, sino todos los países latinoamericanos y la comunidad internacional deben atender, participando de un esfuerzo coordinado.

Entiendo que México y Estados Unidos trabajan en una estrategia conjunta, la cual es bienvenida. El tráfico de armas ligeras es un asunto de gran preocupación para la comunidad internacional.

Este armamento, junto con el crimen organizado y el narcotráfico son factores destructores y desestabilizadores que impiden que las naciones puedan concentrarse en el desarrollo social y económico. Pasamos por un periodo de crisis económica y financiera, así que no hay tiempo que perder.