Eufrosina, el nombre de la equidad

En nombre de la lucha de las mujeres, de las indígenas zapotecas, de las mujeres que crecen en medio de la pobreza y la marginación, Eufrosina ha ganado una batalla contra la corriente de milenarias costumbres, ha demostrado que se puede mantener la fuerza de la tradición con una perspectiva de modernidad, de apego a los derechos y de justicia.

La historia de esta mujer es un resumen de la vida de muchas mujeres por todo nuestro país, es una muestra de lo mucho que debemos trabajar todavía para poder hablar de un equilibrio en los derechos de género, de una verdadera apertura al reconocimiento del valor de las personas más allá de la consideración de si son hombres o mujeres. Hoy, en el Congreso estatal de una de las entidades más pobres de nuestro país, tenemos a una de las voces femeninas que mejor representan la valía de la lucha por la equidad.

Ganó la batalla, por la vía democrática, por los mismos medios e instituciones que vetaron su candidatura a la alcaldía, hoy cuenta con la investidura de un cargo de representación popular y tiene en sus manos las herramientas necesarias para continuar con los ideales que la llevaron a salir adelante, la misma fuerza que pudo llevarla de la sierra oaxaqueña a la universidad hoy la pone en la tribuna legislativa.

Es motivo de orgullo para todas las mujeres que estamos buscando abrir caminos en la representación pública, en los medios, en las instituciones públicas y la vida económica, para todos, hombres y mujeres, que trabajamos por la evolución de nuestra esfera pública, que vemos en los grandes rezagos y obstáculos las oportunidades para ganar grandes batallas. Eufrosina es hoy el nombre de la justicia, de la equidad, pero más que ello, es el nombre de una lucha permanente.

No podemos olvidarnos de que nuestra diversidad cultural, nuestras costumbres y raíces nos conectan con el pasado, pero también pueden frenar nuestro futuro. El caso de la equidad de género es una muestra de ello, pues debemos encontrar el balance entre el pleno ejercicio del derecho y la relación con las tradiciones, sin embargo, el hecho tradicional que hace que esté cerrada la entrada a las mujeres en las asambleas municipales por los “usos y costumbres” se opone a la igualdad de género que está asentada en nuestra Carta Magna.

Nuevamente el Poder Legislativo da las herramientas para encontrar ese equilibrio que nos permita evolucionar hacia una mayor estabilidad democrática, Eufrosina Cruz tiene en las tribunas legislativas la proyección para su voz, el espacio para continuar con su esfuerzo, y en ella tenemos todos un ejemplo de batalla por la vía institucional; ganar por los medios democráticos, a pesar de toda la oposición institucional, a pesar de ser mujer, de ser indígena, de ser pobre, hoy sigue siendo esa misma mujer, pero como diputada local, para ser la voz de quienes comparten el mismo camino de vida que ella ha logrado remontar.

Desde el norte de esta gran República, hacemos un reconocimiento al valor de Eufrosina Cruz Mendoza, esperamos que su periodo como legisladora dé muchos frutos a la gente de Oaxaca y que este sea sólo el primer peldaño de la larga escalera de una carrera pública que comienza con gran fuerza, esperamos que su nombre sea motivación para muchos otros que están librando batallas por la justicia y la equidad.

Soy Edna Lorena Fuerte y mi correo es ednafuerte@gmail.com para sus comentarios. Gracias.