Ex dirigente de Spayt tras protestas contra educación

Poco a poco van saliendo los trapitos al sol en lo que se refiere a las protestas llevadas a cabo por el Sindicato de Trabajadores del Spayt.

Fuentes cercanas al sindicato, aseguran que Josefina Hernández García es quien realmente esta detrás del asunto, donde los reclamos por recursos de pago y reasignación de centros laborales a los maestros son descontextualizados.

Resulta que el Sindicato reclama pagos que la Federación no ha enviado, sin embargo hace su protesta enfocada al Gobierno del Estado y no toca, ni con el pétalo de una rosa, a la Federación.

Otro reclamo es la re ubicación de maestros a lugares donde tengan trabajo, al considerar que no tienen alumnos en algunos centros, sin embargo el sindicato los quiere donde estaban aunque no trabajen, "hagame uste el favor".

En este contexto resulta que voces al interior del sindicato aseguran que Josefina Hernández García es la instigadora del movimiento, e incluso que fue quien organizó un nuevo sindicato, después de la derrota del candidato del PRI a Gobernador, Enrique Serrano, uniendo este sindicato a otros dos que se hicieron por orden del ex gobernador Cesar Duarte, en Conalep y en Cecytech.

También se habla de que Grizelda Mendoza Paredes, ex directora administrativa del Spayt y jefa de departamento de la dirección académica de Cobach, además de Gabriela Flores, ex directora académica y actual Secretaria del Sindicato de Spayt, estarían como parte del movimiento cuyo objetivo real sería desestabilizar al Gobierno, para atenuar una presunta vinculación a proceso por el desvió de 17 millones de pesos, del cuál ya habrían sido notificadas, entre algunas de las involucradas en este movimiento.

Visto así toma forma una protesta que de otro punto de vista no tiene sentido y que solo afecta a las partes, tanto a los maestros del Spayt, que ya quieren es dar clases y devengar su salario, como al sindicato que esta quemando la pólvora en un infiernito, como al gobierno y por supuesto a los alumnos, el último eslavón de la cadena y el más dañado, como siempre.