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Jueves 24 de marzo de 2011

Falta de Nutrientes Daña la Piel

Una adecuada alimentación evita la anemia y una serie de trastornos que esta conlleva.


Una adecuada alimentación evita la anemia y una serie de trastornos que esta conlleva.

La gran mayoría de los padecimientos dermatológicos se deben a una alteración en el organismo, por ejemplo cuando se tiene anemia por falta de nutrientes, la piel se reseca, pueden verse grietas o fisuras en pliegues, codos o rodillas, así como sufrir inflamación (edema) de piernas y pies, indican especialistas de la Delegación Chihuahua, del Instituto Mexicano del Seguro Social.

También los labios y el cabello se ven secos y éste último además opaco y quebradizo; las uñas se vuelven muy delgadas y frágiles, por lo que se rompen fácilmente y hay una disminución de las papilas gustativas que provocan que la mucuosa esté pálida y la lengua se vea lisa; otra manifestación serían las manos frías.

Los médicos refieren que la caída del cabello, sobre todo cuando es abundante, siempre está relacionado con alguna alteración: puede ser por problemas de la glándula tiroides u hormonal, o debido a una descompensación nutricional por la pérdida de peso rápida y sin control adecuado.

Puntualizan que la piel “es una ventana diagnóstica para detectar problemas internos de nuestro organismo”, sobre todo cuando se lleva una dieta rigurosa y mal equilibrada, ya que esta conlleva a carencias importantes de nutrientes, como grasa, proteínas, calcio, zinc, hierro y vitaminas, que suscitan una serie de cambios en el metabolismo, los cuales se reflejan directamente en la piel.

Otro ejemplo es cuando las personas de convierten en vegetarianas y dejan de consumir productos de origen animal, como la carne, que provee algunas proteínas que el organismo no es capaz de sintetizar ni las aportan los vegetales, por lo que se presentan diferentes grados de desnutrición que se manifiestan a nivel cutáneo.

Esto es la aparición de zonas simétricas enrojecidas que parecen quemaduras de sol y que se agravan cuando se exponen a la luz solar (fotosensibilidad), las cuales no desaparecen y pueden volverse de color café y escamosas; a los síntomas cutáneos, siguen por lo general trastornos gastrointestinales, como nauseas, pérdida