Guerra del festival

Como siempre sucede en nuestro país y en nuestro estado muchos han satanizado en su totalidad las últimas reformas acontencidas en México, sin embargo pocos se han atrevido a defenderlas y ha profundizar en el debate.

En el caso de Chihuahua los senadores, Tere Ortuño y Gustavo Madero, se han convertido en los únicos preocupados por defender las reformas que aprobaron, mientras otros brillan por su ausencia, por lo menos publicamente.

Si bien es cierto que las reglas siempre traen una consecuencia, también es cierto que las reglas se imponen para mejorar la convivencia social, entonces la conclusión es sencilla, algo bueno traen las reformas y hay que conocerlo a fondo para poder criticarlo.

Por otra parte en Chihuahua se esta presentando ya un episodio más de la guerra de los festivales, el Gobierno del Estado ya lanzó su inauguración y ahora en los próximos días sera el Municipio.

Total la guerra continua, veremos ahora el manejo de las audiencias publcias, ya que hay que recordar que en estos eventos el termómetro es la cantidad de personas que asisten a cada uno de los eventos que se van desarrollando.

Por otra parte los festivales representan, tal vez, la última batalla política entre el Gobernador, José Reyes Baeza y el alcalde de Chihuahua, Juan Blanco, quienes en ese terreno han dirimido varias diferencias ideológicas.

Y ya que estamos con el alcalde, cada vez esta más cercano su cierre de administración, al final no le han podido destruir su imagen, sus rivales en Gobierno del Estado, tampoco lo han quemado publicamente como pretendían y de ahora en adelante lo que chorree es miel.

Al salir de la administración si loa tacan lo podrán en los reflectores, en fin al tiempo.