Lesionan a K-9 con arma blanca

Tras cometer un asalto con puñal en una tienda de abarrotes en el fraccionamiento Lourdes la noche del miércoles, el presunto pudo ser detenido con la participación de un binomio canino del grupo K-9, no sin antes causarle al animal dos heridas con cuchillo que ameritaron atención en un hospital veterinario.

Al detenido le fueron asegurados tres puñales y el botín recién obtenido.
En la tienda de abarrotes “Lourdes”, de calles José María Mata y María Greever, fue a las 20:45 horas cuando unidades de la Policía Municipal arribaron para atender el reporte de un robo con violencia en que dos sujetos habían amagado a los encargados con cuchillos, y sustraído un monto aproximado de 1,500 pesos.

Con la descripción de los hombres, se dispuso un operativo inmediato de búsqueda, ya que se tenía información de que habían huido rumbo al parque “El Platanito”, ahí cerca.

Efectivamente fue detectado un hombre con la vaga descripción que dieron los afectados en un canal de la calle Mexicas, por el rumbo de la avenida Juan Escutia, cuando huía a pie.

Al acercarse los agentes, el sospechoso les lanzaba puñaladas con la intención de lesionarlos o causarles algo mayor, ante lo cual debieron utilizar al perro policía “Lothar” como ariete para someterlo. El objetivo se logró: el peligroso hombre fue reducido… pero el animal alcanzó a recibir dos lesiones punzocortantes, una en cada costado, que ameritaron hospitalización en una clínica veterinaria.

El hombre, Neri Daniel Alejo Sánchez, de 23 años, con domicilio en colonia Tierra y Libertad, por su parte, presentaba leves lesiones en una pierna que ameritaron la valoración médica procedimental en la
Comandancia Norte.

Al detenido le fueron asegurados entres las bolsas de la chamarra 3 puñales de unos 20 centímetros de longitud, una cantidad en efectivo y otra en vales de despensa. Fue reconocido a plenitud por los afectados de este incidente, así como por otros eventos, por lo que no se descarta sea procesado penalmente.

El otro hombre implicado, apodado “El Tule” o “El Carnalito”, sin embargo alcanzó a refugiarse en un domicilio plenamente identificado y con datos para investigación preventiva y ministerial.
Este incidente constituye una muestra del arrojo profesional con que trabajan los agentes preventivos municipales y los ejemplares caninos que asimismo son considerados policías.