Viernes 22 de julio de 2016
El gobernador reiteró que fue más difícil la entrada al cargo por el simple hecho de haber llegado a un estado lleno de muertos, secuestrados y extorsiones
El gobernador reiteró que fue más difícil la entrada al cargo por el simple hecho de haber llegado a un estado lleno de muertos, secuestrados y extorsiones
El gobernador César Duarte, después de ser cuestionado de sus sentimientos por su partido, que le está dando la espalda debido a la petición de Armando Barajas de expulsarlo del partido por supuesta vinculación con la corrupción, comentó que lo que en realidad le daría vergüenza sería entregar un estado con sangre y sin educación.
"Me daría vergüenza entregar un estado bañado en sangre, eso sí me daría vergüenza, estarlo entregando sin educación, con carreteras tomadas, ahí sí me daría vergüenza y no es el estado de Chihuahua", comentó.
Asi mismo, el gobernador reiteró que fue más difícil la entrada al cargo de gobernador que la salida, por el simple hecho de haber llegado a un estado lleno de muertos, secuestrados, extorsiones y con empresarios escondidos.
"Eso sí es lo que se daba y me estaría dando vergüenza, estamos entregando al estado en marcha, lo estamos entregando con retos y problemas, si, no negamos que existan pero de ninguna manera los que teníamos hace seis años, con un crecimiento económico y con empleo"
"Yo estoy concretando y terminando acciones que nos permitan que las políticas públicas que integramos con los ciudadanos tengan vigencia en un futuro", concluyó.