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Viernes 11 de abril de 2008

Preocupado Madero por toma del Congreso

El senador chihuahuense opina que no se debe caer en las provocaciones y tener paciencia


El senador chihuahuense opina que no se debe caer en las provocaciones y tener paciencia

El Senador Gustavo Madero, integrante de la Comisión de Energía, expresa su preocupación que priva en estos momentos al Senado de la República, ya que es la primera vez en la historia que se toma la Cámara Alta de Senadores.

En el Congreso tenemos una expresión del Frente Amplio Progresista integrado por el PRD, PT y CONVERGENCIA; donde solo quieren imponer su verdad y si no es la de ellos no la toleran y a consecuencia de ello niegan el diálogo y toman el Congreso, esto es muy lamentable ya que es un retroceso, un acto de autoridad de intolerancia preocupante; comentó el legislador panista.

Gustavo Madero sabe que la mayoría de los mexicanos no comparten esa expresión pero no podemos ni debemos caer en provocaciones ya que tenemos que ser pacientes y esperar que ellos entren en razón al comprender el rechazo amplio de toda la ciudadanía; en el Senado no se va a utilizar la fuerza pública ya que no vamos a caer en una provocación de violencia puntualizó.

Aseveró que la forma de actuar es un comportamiento inaceptable, bien se puede decir que es un golpe de estado, por el hecho de que se está impidiendo el funcionamiento de los poderes. La izquierda que necesitamos hoy en día es una izquierda moderna que vea hacia adelante y que no sea intolerante como la estamos viviendo en el congreso, estamos parados y no podemos avanzar hasta que abandonen la tribuna.

En el momento que tomaron el Congreso se estaba discutiendo el formato de cómo abrir los foros de análisis donde se invitarían a varios analistas para enriquecer y contrastar los puntos de vista, esto estaba en camino y en un acto incomprensible se cierran los diálogos; además teníamos 12 temas que dictamino la comisión de energía entre los cuales están:

— Los debates generales

— Los temas fiscales

— Los temas tecnológicos

— La transparencia

— La producción

— La refinación en materia petrolera

— Y el almacenamiento, entre otros más.

Estábamos a punto de establecer un calendario de reuniones con cara a la sociedad, donde se podrán ver en la televisión normal y en el canal del senado, además de escuchar en la radio todo lo relacionado a la reforma energética y cuando se agote esta discusión poder dictaminar, es lo que se esperaría normalmente del congreso. Esta iniciativa no tiene tiempos cortos ni largos ya que mientras haya consenso sale la reforma; el chiste es abrir los espacios para ver las ideas y de ahí revisar los acuerdos y desacuerdos que son respaldados por una mayoría de legisladores que vota en un sentido, expresó Madero.

Esta iniciativa del Presidente de la República toma toda consideración y no se modifica en la constitución el art. 27 ya que Pemex es y será de los mexicanos; si esta reforma se aprueba va a permitir que Pemex se modernice, todo esto es para darle mayor autonomía, más recursos y libertad para evitar el someterse en los requerimientos burocráticos de las adquisiciones que se hacen en el gobierno de manera muy complicada, además se obtendrían aproximadamente 150 mil millones de pesos anuales los cuales se pueden utilizar para programas sociales y de infraestructura. Si esta reforma se llegara a aprobar, con ello resolviéramos el problema de la disminución de las reservas e importaciones de gasolina, nos ahorraríamos aproximadamente 550 millones de pesos al día, (costo de oportunidad de la reforma) para invertir en explotación y podríamos contar con una refinería en México y no tendríamos que contar con una alianza donde tenemos que mandar el petróleo y esperar a que no lo manden ya refinado, con mayor valor agregado; aseguró Gustavo Madero.

El Senador por Chihuahua hizo mención en los bonos ciudadanos, la cual es parte de lo más innovador de la iniciativa hacia Pemex.

Para finalizar Gustavo Madero puso como ejemplo a Brasil, esta reforma la aplicaron hace 13 años y hoy ya nos adelantó en tecnología, tanto financiera como operativamente y cada día que nos tardemos en aceptar la reforma a México le cuesta.