Programa oportunidades

Con seguridad los números que tiene el PRI en el Estado de Chihuahua, sobre la intención del voto para las elecciones de gobernador, no son buenos para la causa de los tricolores y sus aliados y esta situación ha generado en la campaña de César Duarte un nerviosismo que se manifiesta en los ataques al programa federal de combate a la pobreza Oportunidades. En la semana que terminó el sábado 5 de junio, el candidato confederado CDJ haciéndole eco al gobernador, hizo uso de los medios de comunicación para señalar sin pruebas, que “hay evidencia sobre mal uso de Oportunidades” y que “denunciará el presunto manejo de los recursos públicos a favor de su competidor de Acción Nacional”. CDJ dio a entender que al igual que el gobernador Baeza Terrazas estará listo y,“cuando se tengan los elementos se hará la denuncia”.

Con el agravamiento de la crisis de seguridad en ciudad Juárez en febrero pasado, el gobernador JRBT, pidió al gobierno federal su apoyo solidario y de recursos económicos extraordinarios para implementar 160 acciones de desarrollo social estimadas en 3,500 millones de pesos para este año, que sirvieran como una política paralela al despliegue de fuerzas federales enviadas para restablecer la paz en la frontera y reconstruir lo que ahora llaman el tejido social. Con el programa TODOS SOMOS JUAREZ, el gobierno del presidente Calderón está cumpliendo con la petición de los juarenses y de los gobiernos estatal y municipal, pero ahora resulta que el gobernador, el PRI y su candidato a titular del poder ejecutivo estatal quieren que se suspendan los trabajos y las inversiones, porque creen que la administración panista opera con el interés con que lo hacen los programas estatales de combate a la pobreza, como Encuentro con Nuestra Gente, que están dedicados en cuerpo y alma a la campaña de los confederados en busca del carro completo en las elecciones del domingo 4 de julio como ya lo ha proclamado la dirigente nacional Beatriz Paredes.

La campaña contra Oportunidades es nacional. Manlio Fabio Beltrones, el coordinador de los senadores del PRI, está recorriendo el país, en apoyo a los 12 candidatos de su partido y aliados, porque tienen miedo a perder las elecciones que ellos, apoyados en encuestas dudosas, creían tener seguras, en su loca y anticipada carrera por Los Pinos en 2012. Los 18 gobernadores del PRI ya ni trabajan por estar pensando en la elección presidencial y todos somos testigos que este 2010 y el año que entra se dedicarán a hacer turismo electoral, recorriendo todos los estados en donde haya elecciones para tratar de apuntalar a los candidatos de su grupo político. Es tal la ambición de los priistas por recuperar el poder nacional que perdieron en 2000, que de manera por demás infantil, quieren que se les entreguen a los gobernadores de los estados empobrecidos y gobernados por ellos, los programas para el combate a la pobreza que son implementados por la administración federal panista. Los gobernadores del PRI no ocultan sus ya conocidas prácticas de comprar votos con los recursos públicos, pero ya no se conforman con gastar en las campañas políticas los recursos estatales a su cargo, sino que ahora quieren disponer libremente de los dineros públicos federales.

Con todo y el triunfalismo de la familia revolucionaria, el PAN y sus aliados ganarán las elecciones de gobernador de Oaxaca, con Gabino Cue Monteagudo, perredista que tiene empate técnico con el candidato del PRI. Xóchitl Gálvez, excomisionada de la política indigenista de Fox, en estos días, solo estaba a 5 puntos abajo en Hidalgo. En Sinaloa, el candidato de la alianza PAN-PRD, saldrá adelante, porque los sinaloenses no aceptarán como gobernador al candidato del PRI Jesús Vizcarra Calderón, por su calidad de compadre del famoso Mayo Zambada, del poderoso Cártel de Sinaloa y finalmente, Carlos Borruel ha demostrado que tiene capacidad de trabajo suficiente y carisma para derrotar a el candidato César Duarte. La propuesta de gobierno de Borruel está más ligada a los intereses de las clases populares del Estado y siendo las mayorías de ese nivel socioeconómico, el triunfo del candidato a gobernador del PAN está asegurado.