Provoca molestia visita cobarde de Calderón

Luego de la visita del presidente Felipe Calderón para inaugurar una nueva planta de la compañía Ford, que generará más de 4,000 empleos directos e indirectos y que forma parte de un plan de inversión de 3,000 millones de dólares.

En su discurso, Calderón no mencionó la crisis de violencia que afecta a la zona, ni destacó los avances del gobierno en la lucha contra las organizaciones criminales.

Esta vez la opción fue más bien el silencio. Una omisión que a varios representantes empresariales, políticos y defensores de los derechos humanos les pareció equivocada.

Para Héctor González, presidente del Colegio de Abogados de Ciudad Juárez, la visita del presidente Calderón para inaugurar una planta de la empresa Ford pareció una "tomadura de pelo".

No está funcionando la estrategia contra el crimen organizado (...) la fuerza pública sólo aparece como reacción a los crímenes.

"Esto es una burla. Vivimos en un clima de terror y el responsable es el presidente Felipe Calderón. No está funcionando la estrategia contra el crimen organizado, porque no hay operaciones de inteligencia y la fuerza pública sólo aparece como reacción a los crímenes", le dijo González a BBC Mundo.

Una opinión similar expresó Soledad Maynez, presidenta de la Asociación de Maquiladoras de Ciudad Juárez, quien recientemente solicitó la intervención de los cascos azules de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para frenar la ola de violencia en la región.

"Yo creo que el señor Calderón ha sido muy claro en su visita. La seguridad no es un tema prioritario para su gobierno".

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad Juárez, Carlos Chavira, le comentó a BBC Mundo que hubiera sido importante que el mandatario visitara otras ciudades y no sólo la capital del estado.

Sin embargo, su tono fue mucho más conciliador que el de otros dirigentes. Chavira planteó que la estrategia contra el crimen organizado ha dado resultados en algunos aspectos como la incautación de droga, la liberación de secuestrados o el desmantelamiento de grupos criminales.

Pero al mismo tiempo reconoció que se han disparado los delitos de fuero común, las ejecuciones, las extorsiones y los secuestros.

"Es muy importante la cooperación multilateral, porque el problema de violencia en Juárez es un problema global que requiere una solución global", afirmó Chavira.

La ganadora del Premio Nacional de Derechos Humanos, Esther Chávez, expresó su decepción por la visita del mandatario.

Fue una visita cobarde. Calderón debería venir a rendir cuentas por los cuatro mil muertos
Víctor Quintana, Premio Nacional de Derechos Humanos
"Nos sentimos frustrados y molestos, porque el presidente no se refirió a los graves problemas que estamos soportando".

Y quien realizó una de las críticas más duras fue el diputado opositor Víctor Quintana, del Partido de la Revolución Democrática, quien calificó la visita de Calderón como una ofensa.

"Fue una visita cobarde. Calderón debería venir a rendir cuentas por los 4.000 muertos que hemos tenido en Chihuahua en menos de dos años".

Las autoridades mexicanas atribuyen el clima de violencia al enfrentamiento entre los carteles de Juárez y Sinaloa por el control de las rutas de distribución de drogas hacia Estados Unidos y por el mercado local.

El gobierno considera que el plan de seguridad contra el crimen organizado está funcionando, porque se han conseguido decomisos récord de drogas, armas y dinero, y se ha capturado a líderes y altos mandos de los carteles de las droga.