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Viernes 29 de mayo de 2009

¿Qué esconden los regidores del PRI?


El colmo, del colmo, de los colmos.

Ahora resulta que los regidores del PRI están enmuinados porque dizque los están monitoreando desde las oficinas centrales de la Coordinación de Sistemas del Municipio.

Pos que no sabrán los regidores que en cualesquier red el administrador monitorea todas, absolutamente todas, las computadoras que están en dicha red.

Pos que no sabrán los regidores que esta situación no es privativa del Municipio de Chihuahua y que los grandes genios que pueden tener ahí, en la Coordinación de Sistemas, no superan a los de Microsoft o a los proveedores de software, que al final de cuentas son los que diseñaron estos sistemas de administración de redes.

Para información de los regidores, no me aguanto las ganas de instruirles que el monitoreo de redes es en cualquier red, osease en el Gobierno del Estado, en el Gobierno Federal, en las empresas privadas, en las escuelas, en la casa blanca, en todos, absolutamente todos los lugares donde se encuentre una red.

¿Porque se hace así?

La respuesta es sencilla; simplemente porque las computadoras deben ser utilizadas para asuntos oficiales, deben ser como el cuaderno de notas de un funcionario público, totalmente transparentes.

Ó, acaso los regidores tienen algo que ocultar y por eso se enojan de que los monitoreen? ¿que será?, la respuesta a esta pregunta debe ser interesante, porque si es así podrían comprar por 450 pesos mensuales, una tarjeta de banda ancha de Telcel o Iusacell, más una computadora laptop, para hacer y deshacer en la red con sus propios recursos y sin espías.

En fin, según yo, el señalamiento político y mediático es simplemente la reiteración de un mensaje político para que caigan los párvulos (Léase de corta edad), una ligereza para tratar de pegarle al Municipio y a su administración, sabrá Dios con que fines. Por supuesto, no creo que sea por el proceso electoral.

Hablando de política para párvulos ayer cayó el telón en la novela de Juan Blanco, el juez simplemente dejó claro, "No hay sustento en ninguna de las acusaciones".

O sea que simplemente la Procuraduría de Justicia del Estado acuso sin fundamento a Juan Blanco de delitos inexistentes, basados en el solo dicho de una o dos personas, sin existir daño al erario.

De antemano se sabía del fin político que se perseguía con este proceso, "porque en la política, como en la guerra y como en el amor, todo se vale".

La pregunta sería para los medios que utilizaron una basta cantidad de papel en difundir los grandes hallazgos del método científico de la PGJE utilizado en contra de Juan Blanco, ¿utilizarán ahora la misma cantidad para resarcir el daño moral? al hoy candidato a diputado. En fin, hasta pronto.