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Lunes 10 de diciembre de 2007

Reforma Migratoria; Clamor general

"11 millones de indocumentados necesitan las reformas migratorias para poder trabajar en paz", Armando Ochoa


"11 millones de indocumentados necesitan las reformas migratorias para poder trabajar en paz", Armando Ochoa

Una reforma integral a la política migratoria donde se incluya otorgar visas de trabajo a los migrantes extranjeros, un programa de empleo temporal y permitir a los familiares de los migrantes visitar a sus familias, fueron las peticiones directas realizadas por el Obispo de la Diocesis de El Paso Texas, Armando Ochoa, durante la misma binacional realizada hoy en el Puente Internacional entre Presidio Texas y Ojinaga Chihuahua.

En la misa realizada hoy estuvieron presentes diferentes personalidades del mundo político y social, entre ellos el diputado local, José Luis Cisneros, el representante del Gobernador del Estado en temas religiosos, Sergio Martínez Garza, el exalcalde de Chihuahua, Juan Blanco Saldivar, el Presidente Municipal de Ojinaga y el Mayor de Presidio Texas.

Durante su participación al final de la misa concelebrada con el obispo de Chihuahua, José Fernández Arteaga, el obispo estadounidense definió en forma clara y precisa lo que la Iglesia Católica considera como una política justa hacia la población migrante al vecino país americano.

"Existen 11 millones de trabajadores indocumentados que necesitan que se lleven a cabo las reformas migratorias para poder trabajar en paz, porque la migración es producto de la distribución inequitativa de bienes a nivel global" dijó el obispo.

Asimismo comentó que esta comprobado que la migración es un problema social y económico, razón por la cuál la iglesia esta preocupada, en base a la doctrina social migratoria determinada en el año 2004.

Armando Ochoa se refirió también al gasto de un billón de pesos en los últimos años, por parte del gobierno americano, para supuestamente incrementar las medidas de seguridad en la franja fronteriza entre México y los Estados Unidos.

Señaló que la migración no es delicuencia y la construcción de mallas y muros no detiene realmente nada, ya que las cifras de migrantes se han seguido incrementando a pesar de las inversiones.

Por tal motivo exhortó a los gobiernos a trabajar en las reformas, para que la inversión en seguridad sea dedicada en forma específica a la delincuencia.

Por su parte Monseñor José Fernández Arteaga, exhorto a la comunidad a no buscar culpables sobre el tema de la migración, pero si soluciones que vayan apegadas al respeto de las personas.

Recordo que la Sagrada Familia, integrada por Jesús, María y José, personajes fundamentales en la doctrina católica, fue una familia migrante, la cupal huyó del poder mundano del Rey Herodes, en aquellos tiempos, por lo tanto dejó claro que la migración es algo que no debe ser sentenciado de ninguna manera.