Riesgoso, sacar al Ejército de las calles

Raúl Plascencia Villanueva, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), aseguró que el debate sobre la presencia del Ejército en las calles debe de terminar porque sería un riesgo que regresara a los cuarteles en aquellos estados en los que se han obtenido resultados positivos.

En la reunión ante la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados señaló que en lugar de seguir discutiendo sobre los militares en las calles se deben hacer propuestas concretas sobre el tema.

"Sin duda alguna, entendemos que regresarlos al cuartel, como se ha señalado en distintos foros, sería muy arriesgado en estos momentos, sobre todo en aquellas regiones del País en donde la presencia militar, de alguna manera ha logrado contener a los delincuentes", expresó.

"En ese contexto, considero muy oportuno terminar el debate y trabajar en las propuestas, en los mecanismos que las Fuerzas Armadas requieren, a fin de que la función pública, tan delicada y trascendental que hoy realizan, se haga con debida diligencia, eficacia y oportunidad".

El Ombudsman dijo que uno de los proyectos que la CNDH planteó a la Cámara baja es clarificar los protocolos de coordinación entre militares y autoridades civiles en la lucha contra la delincuencia para evitar violaciones a los derechos humanos.

Detalló que otra de las propuestas es involucrar más a los ciudadanos para lograr concretar las decisiones gubernamentales que exige la gente y realizar una evaluación permanente a las fuerzas castrenses.

"La evaluación permanente y continua de las acciones emprendidas, con la finalidad de verificar el avance en materia de seguridad pública en todo el País. Si no evaluamos los avances no podremos corregir los errores", señaló.