Síndica; proceder inaceptable

“Las democracias no necesariamente conducen a valores liberales. Sin embargo, sembrar valores siempre conducirá a ejercicios democráticos”.

Thomas Jefferson

La vida política es cruel con los funcionarios que llegan a un puesto con promesas y falacias. Tal es el ejemplo de la Sra. Lic. Liliana Álvarez, ya que, con su actitud y proceder, deshojó su responsabilidad como blanca margarita en apenas nueve meses de su compromiso como Sindica del actual Gobierno Municipal.

Liliana Álvarez incursionó en la política bajo la estafeta de un real y verdadero cambio en el delicado puesto de Sindica Municipal. En su campaña política convenció y triunfó; entre otras razones por las promesas al electorado. Se recuerda en especial cuando ofreció, que su gestión sería la de velar por los intereses económicos de los chihuahuenses por encima de ideologías partidarias. También declaró y se publicó a ocho columnas en un reconocido medio de comunicación: “No me voy a pelear con nadie”. Sin embargo una y otra vez se ha apartado de ellas en momentos trascendentales para la vida democrática del municipio.

El caso de Liliana Álvarez, es un ejemplo lamentable y tangible de aquellas personas que arriban al medio gubernamental con el único fin de hacer carrera política, siempre en base a intereses particulares, de grupo y acatando ciegamente las instrucciones de su partido político; sin importar, lamentablemente, que dichos mandatos e imposiciones, en algunas ocasiones sean por encima de las instituciones, el profesionalismo, la transparencia, el bienestar social, las convicciones, las promesas, el bien común y la calidad humana que su delicado puesto demanda. Aunado al elemental principio de todo servidor público: “ser coherente en lo que se promete, se dice y se hace”.

En el actual momento, en el que la nación reclama mujeres preparadas para llevar en acenso la trascendental Equidad de Genero, observamos como una promesa política femenina, lastimosamente, se auto incauta el cerebro ideológicamente hablando; renunciando a cualquier apuesta transformadora real y democrática, actuado en franca decadencia a todas las promesas vertidas y a lo esperado de ella por la ciudadanía.

Liliana tiene la extraña cualidad de haber trasmitido en corto tiempo a la comunidad chihuahuense, la no grata señal de haber traicionado sus promesas. Pero lo más grave, es que ella considera que nadie se percata de su proceder, o que sus “habilidades” son superiores, para manejar a su arbitrio e intereses ideológicos los conflictos que surgen en el H, Ayuntamiento. He aquí unos cuantos ejemplos……

En cumplimiento a la primera consigna política que recibió, se ha dedicado a escudriñar y rastrear por todos los rincones municipales, alguna falla que pudiera haber cometido la administración anterior, encabezada por Juan Blanco Z.

La Sra. Sindica Liliana Álvarez, se sacó de la manga la “Contraloría Social”, la cual no es sino un burdo enjuague para un mayor control político en las colonias de la capital del estado a favor de su partido político, con la única finalidad de llevar agua a su molino en las próximas elecciones, 2009 y 2010.

Incautó el asunto de los regidores José Abdo Rohana y Ricardo Boone, prometiendo a la brevedad posible, un veredicto sobre el delicado tema, el cual lo alargó negligentemente para proteger al Regidor Ricardo Boone que sería por mucho, el más afectado económicamente; sin prever el cúmulo de conflictos provocados por su grave negligencia, la cual ocasionó una pequeña erupción, el jueves 12 de junio en la reunión de Cabildo celebrada en Colonia Soto.

En su informe de auditoría correspondiente al ejercicio fiscal 2007, efectuado a la Dirección de Aseo Urbano, presenta en el mismo, fotos correspondientes al año 2008. Además proporciona una serie de datos de los 109 parques “visitados”, he aquí algunos de ellos: árboles secos, 707, arbustos secos, 610, palmeras secas 19 y 423 pozas donde existían árboles que no se han repuesto. Sin embargo, el dato fidedigno de los miles y miles de árboles plantados y sustituidos no aparecen en ninguna parte. ¿Se trata de ocultar lo positivo e informar solo lo negativo?

El problema principal de la Sra. Sindica Liliana Álvarez, es que no ha podido entender que ella navega junto con todos en el barco llamado Ayuntamiento de Chihuahua y que su trascendental misión es señalar y contribuir a resolver las fallas que encuentre en las auditorias practicadas, y no la de acusar constante y ligeramente a los directores y funcionarios de primer nivel de la actual administración y mucho menos proporcionar información confidencial a los medios de comunicación, antes de agotar los procedimientos que le marca con toda claridad el Código Municipal, en el capitulo V: (prerrogativas de los Regidores y del Sindico). ¿Se está trabajando para la institución o para los medios…..?

Sin embargo, como dice el conocido director cinematográfico Woody Allen, ninguno de los señalamientos anteriores “Son nada personal” y en el momento en que la Sra. Sindica se agregue para remar unidos, efectuando siempre el mejor esfuerzo para lleva al barco municipal a puerto seguro; avanzando en el importante aspecto de la transparencia y honestidad. Que su trabajo de vigilancia y análisis sean con hechos y no solo con palabras, por encima de intereses ideológicos, en forma diáfana, clara y sin tintes partidistas. Sin duda alguna, en ese momento será reconocida por la comunidad que confió en ella, así como por sus compañeros de equipo, quienes también, en ellos, recae importante responsabilidad y desean verla como compañera, no como enemiga política. Liliana debe dejar los asuntos y el golpeteo políticos a los líderes de su partido, sin inmiscuirlos en su delicada labor institucional.

La Sra. Sindica no es un ente separado del H. Ayuntamiento, es parte de el, ya que el propio municipio, en aras de la transparencia y buen manejo económico, le proporciona el equipo de trabajo a la Sindicatura, además de los apoyos y la información para que desempeñe su delicada función. El propio municipio es el principal interesado en que la Sra. Sindica señale las irregularidades dentro de un marco legal, que está debidamente sustentado en el código municipal.

Así las cosas, es pertinente señalar también y se debe reconocer, que la Sra. Sindica Liliana Álvarez, es una persona capaz, inteligente, preparada, elocuente y con un trato personal adecuado a su importante responsabilidad. Su falla mayor es la falta de pluralidad en su desempeño gubernamental.

También es valido señalar, que de no ejercer un cambio importante en su falta de pluralidad en los próximos 27 meses que le quedan a la actual administración, el desgaste será muy intenso y los resultados pobres, medidos desde la óptica ciudadana, que es la que quita y pone políticamente.

Que en base a la unidad, transparencia y democracia, se deje un legado superior y un Chihuahua mejor al que recibimos. Las actuales y futuras generaciones recordarán a la administración municipal, 2007-2010, por sus obras, por su avance hacia la modernidad, pluralidad y democracia, no por los pleitos que constantemente se suscitan y que no benefician ni a rojos ni azules.

El reto, es aprender a convivir y avanzar a pesar de las diferencias ideológicas. Con “Unidad en la diversidad”. Todo el municipio gana.