La historia nos ha demostrado que todo pueblo oprimido termina por rebelarse de forma violenta. El afán recaudatorio del gobierno ha llegado a niveles de desbordamiento. Su voracidad desmedida contribuye al caldo de cultivo para un estallido social de proporciones insospechadas. Basta una piedra para agitar las aguas de un lago. La gente mas peligrosa es aquella que no tiene nada que perder. Y al paso que vamos, entre autoridades abusivas (tránsitos, policías recaudadores) Empresas de gobierno, Empresas privadas con la complacencia del gobierno, Asaltantes, sicarios, secuestradores y extorsionadores (incluyendo en este rubro también a policías de todas las corporaciones) Estamos a nada de no tener , efectivamente, nada que perder.
La historia nos ha demostrado que todo pueblo oprimido termina por rebelarse de forma violenta. El afán recaudatorio del gobierno ha llegado a niveles de desbordamiento. Su voracidad desmedida contribuye al caldo de cultivo para un estallido social de proporciones insospechadas. Basta una piedra para agitar las aguas de un lago. La gente mas peligrosa es aquella que no tiene nada que perder. Y al paso que vamos, entre autoridades abusivas (tránsitos, policías recaudadores) Empresas de gobierno, Empresas privadas con la complacencia del gobierno, Asaltantes, sicarios, secuestradores y extorsionadores (incluyendo en este rubro también a policías de todas las corporaciones) Estamos a nada de no tener , efectivamente, nada que perder.