"Los Reyes no son activistas"

De acuerdo a informes que reveló la página electrónica WikiLeaks (famosa a nivel mundial por la filtración de información oficial), la activista Josefina Reyes, fue ultimada en El Valle de Juárez no por su actividad de derecho-humanista, sino, por ser madre del presunto sicario y traficante del Cártel de Juárez, Miguel Ángel Reyes Salazar, alias "El Sapo", detenido en la ciudad de Nuevo Casas Grandes junto con un famoso capo de nombre José Rodolfo Escajeda Escajeda alias "El Rikín", quien era buscado por la DEA y el FBI.

La página de Internet que se distingue por la filtración de documentos con contenido sensible en materia de interés público, preservando siempre el ocultamiento de sus fuentes, informó también, que lejos de creerse que Josefina Reyes había sido asesinada por su labor de activista social, fue porque defendió a su hijo que estaba involucrado en actividades del narcotráfico, y que el grupo contrario al que su consanguíneo servía, denominado Cártel de Sinaloa, terminó por ultimarla.

Agregando que el documento, que "El Sapo" fue detenido en dos ocasiones por elementos del Ejército Mexicano.

Las amenazas hacia los defensores de los derechos humanos son reales y todo indica que están en aumento en México, afirma el cable de la embajada de Estados Unidos, fechado el 28 de enero de 2010: (10MEXICO294) (246089).

El cable aporta este dato señala WikiLeaks: "Reyes fue la madre del presunto sicario y traficante del Cártel de Juárez, Miguel Ángel Reyes Salazar, "El Sapo".

El cable firmado por John Feeley, funcionario de la legación diplomática, afirma que a pesar de saberse de la conexión con la delincuencia organizada, por parte del hijo de la activista, la prensa nacional retrató su muerte como el asesinato de una defensora de los derechos humanos.

Añade, organizaciones nacionales e internacionales de derechos humanos ejercieron presiones importantes para que el gobierno de México actuara sobre el asesinato de Reyes.

Feeley, el firmante del cable, según WikiLeaks, fue el encargado de informar sobre la visita de los sobrevivientes de la familia Reyes Salazar, quienes, tras el asesinato de otros tres de sus miembros, abandonaron El Valle de Juárez, y se trasladaron a la Ciudad de México.

Argumenta además WikiLeaks, que el 5 de marzo pasado, Feeley habló en CNNMéxico para explicar que habían recibido a la familia Reyes Salazar, pero negó que estuviera en curso el asilo político.

Además, se expone que Josefina Reyes, aliada con elementos de la comunidad de derechos humanos de Juárez, se opuso a la presencia del Ejército Mexicano en la ciudad después de que el Ejército detuvo y posteriormente puso en libertad a su hijo, en 2008.

Reyes dijo que la detención de su hijo fue un secuestro, afirma el escrito publicado en Internet por WikiLeaks.

Miguel Ángel Reyes Salazar, fue liberado y detenido nuevamente en septiembre de 2009, como parte de un grupo, dice el cable, encabezado por José Rodolfo "Rikín" Escajeda, operador del Cártel de Juárez" (extraditado en diciembre de 2010).

El comunicado sostiene que se cree que Escajeda fue responsable de los asesinatos de Benjamín Le Baron y Luis Widmar, líderes de la comunidad mormona y ciudadanos estadounidenses.

Detalla, que de acuerdo al seguimiento, basado en información de prensa y reportes del Consulado en la ciudad fronteriza, Josefina Reyes, activista civil y ex política local, fue asesinada por presuntos sicarios del Cártel de Sinaloa.

Para el gobierno de Estados Unidos, Reyes tuvo reconocimiento tanto deseado como no deseado por su activismo, que incluyó una huelga de hambre en 2008, cuando su hijo fue levantado.

De igual forma, dirigió varias marchas y protestas en Ciudad Juárez y participó en el Foro contra la Militarización y la Represión organizado por el Frente Nacional Contra la Represión.

Hizo alianzas con numerosas organizaciones no gubernamentales locales e internacionales.

WikiLeaks, asegura que ella (Josefina Reyes) comenzó a recibir amenazas de muerte en 2008 y ese mismo año informó que los militares entraron dos veces a su casa, rompieron ventanas y puertas y le robaron sus pertenencias.

También cita que la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos publicó un informe, en octubre de 2009, en el que documentó 128 agresiones contra activistas de derechos humanos de enero de 2006 a agosto de 2009, entre ellos 10 asesinatos y tres secuestros.

Igualmente, informa que AI llamó al gobierno de México y a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a proteger a tres activistas que colaboraban con Reyes (al menos una de ellas, Cipriana Jurado, se halla en Estados Unidos a la espera de que se le conceda el asilo).