Que Diosito ayude a Ramón Ayala

Celso Piña defiende a su colega, arraigado luego de tocar en una fiesta organizada por narcotraficantes. El regiomontano dice que lo que le pasó al “Rey del acordeón” también le puede ocurrir a él. “Tú me puedes contratar y si eres asesino, ¿a mí qué?”, afirma

Al músico Celso Piña le incomoda pensar que el día de mañana le pueda suceder lo mismo que a su colega Ramón Ayala, arraigado luego de tocar en una fiesta donde estaba el narcotraficante Arturo Beltrán Leyva. Para las autoridades, El rey del acordeón es sospechoso de lavado de dinero y de sostener nexos con el crimen organizado.

El Rebelde del acordeón se solidariza con Ayala, a quien conoció en su juventud cuando iba a sus conciertos organizados en Topo Chico, cercano a la ciudad de Monterrey a principios de los años 70 y por él surgió su amor por el acordeón.

El próximo año comenzará su gira del disco Sin fecha de caducidad, y las referencias que seguirá solicitanto solamente serán: nombre de quien lo contrate, lugar, presupuesto y cuántas horas tocará. Jamás preguntará a su contratista si es un asesino o jefe de un cártel de la droga.

—¿Qué opina del caso Ramón Ayala?

—Es un gran pesar para todo el gremio de la música, así como le tocó a él me puede tocar a mí o a otro, creo que eso no debería pasar, uno anda alegrando a la gente y resulta que te confunden con otras situaciones, qué ironía. Todo Monterrey lo hemos sentido y me habla la raza y colegas músicos para lo mismo, para mostrarle nuestro apoyo. Ojalá que Diosito ayude al Rey del acordeón y se le aclare pronto su situación para que se la pase con su familia, porque esto es lo más triste que le pueda pasar a un ser humano.

—¿Le dolió el enterarse del arraigo de Ramón Ayala?

—A todos nos duele que una persona tan pachanguera, dinámica, trabajadora, que tocaba para los presos, en eventos para recaudar fondos para buenas causas y que se vea inmiscuido en esa situación, me sacó mucho de onda, no pueden hacerle eso al maestro, de qué se le conoce, pues de alegrar a la gente nada más.

—¿Cómo músico puede pedir referencias de quien lo contrata?

—Por supuesto que no, a uno lo contratan y en el contrato viene todo lo que nos interesa saber, cuánto voy a ganar, dónde es y a qué hora empiezo, la vida personal de cada cliente es de ellos. Lo mismo que le pasó al maestro don Lupe Tijerina (Cadetes de Linares, también arraigado), hemos estado por León, Guanajuato, juntos y es honesto y trabajador, me duele que los involucren en ese tipo de situaciones.

Tú me puedes contratar y si eres un asesino a mí qué, no te voy a preguntar ¿eres asesino? El contrato sólo dice a cuánto la hora, en dónde es y fírmale aquí, en eso nos basamos, nada más.

—¿Usted teme qué algún día lo involucren así?

—Dicen que el mundo es una jabonera, cualquiera puede resbalar; así como le tocó a estos señores, nos puede tocar a nosotros o a otras agrupaciones el día de mañana, somos tantos que nos dedicamos a esto que las autoridades deberían tener un poco de cuidado para esto, porque si tienes una trayectoria de 40 años como músico, es inexplicable que esté metido en cosas de este tipo.

Regala de Navidad canción

Después del lanzamiento de su disco Sin fecha de caducidad, en el que participaron músicos como: Benny Ibarra, Alex Lora, Laura León, Sargento García, Ely Guerra, Lila Downs, Pato Machete, Eugenia León, Aleks Syntek y Natalia Lafourcade y el cual permanece en el quinto lugar de ventas a nivel nacional, Celso y el grupo Inspector regalará gratuitamente esta navidad la canción “El año viejo”, original de Tony Camargo.

“El Gran Javi de Inspector me hizo el favor de intervenir en uno de mis discos y hace un par de años ahora se les ocurrió invitarme y le entré. Ya grabamos el tema, la rola es buena, tiene el estilo ska con cumbia-vallenato; está muy dinámico el ritmo, el acompañamiento, la letra está padre y me gustó mucho el tema”.

El próximo año iniciará de manera positiva, pues será invitado especial en el Festival de las Artes de Barranquilla, Colombia a finales de Enero.

—¿En sus planes está seguir colaborando con bandas juveniles como lo hizo con Café Tacvba, Control Machete?

—La cumbia no está peleada con el rock, con el ska, con el bolero, el bossanova, el cha cha cha, todo es música y es cuestión de fusionar suavemente hasta que suene franco y original.

—¿Hay más amigos que quieren grabar con usted?

—Sí, cómo no; para este disco pensamos sólo en cinco invitados y se fueron sumando muchos, hasta que les dije (a sus productores): espérame tantito, porque nunca vamos a terminar de grabar. Dondequiera que vamos la raza pide que los invite, a veces hasta me da un poco de pena decirles que ya no. Después de este disco debemos hacer más fusiones.