Lunes 2 de septiembre de 2024
México.- Volkswagen no puede descartar el cierre de plantas en Alemania, ya que busca formas de ahorrar varios miles de millones de euros adicionales en una campaña de reducción de costos en curso en su marca homónima, dijeron este lunes el fabricante de autos y su comité de empresa.
La compañía considera que una gran fábrica de vehículos y otra de componentes en Alemania han quedado obsoletas, según el comité de empresa, que prometió una "feroz resistencia" a los planes de la junta directiva.
Volkswagen indicó que también se ve obligada a poner fin a su programa de seguridad laboral, en vigor desde 1994, y añadió que todas las medidas se debatirán con el comité de empresa.
Las posibles medidas, dirigidas a su principal marca de automóviles de pasajeros, así como a otras operaciones del grupo, también incluyen intentar poner fin al pacto de la compañía con los sindicatos para mantener los empleos seguros hasta 2029, dijo la compañía.
Cualquier cierre marcaría los primeros cierres en Alemania durante los 87 años de historia de la compañía, lo que prepararía a VW para un enfrentamiento con poderosos sindicatos.
"El entorno económico se ha vuelto aún más difícil y nuevos actores están ingresando a Europa", dijo el director ejecutivo de VW, Oliver Blume, en un comunicado. "Alemania, como lugar de negocios, se está quedando cada vez más atrás en términos de competitividad".
Un conflicto laboral en toda regla sería una prueba importante para el director ejecutivo, que también dirige la marca de autos deportivos Porsche, después de que los enfrentamientos sindicales derribaron a varios de sus predecesores VW.
La compañía ha luchado por reducir costos en su marca homónima de pasajeros, donde los márgenes de ganancias se han quedado atrás durante mucho tiempo, y los esfuerzos se han vuelto más difíciles en medio de una transición torpe a los vehículos eléctricos y una desaceleración del gasto de los consumidores.
La jefa del comité de empresa, Daniela Cavallo, dijo que la gestión de VW había fracasado después de que las reuniones detallaran que la marca principal de la compañía, que fabrica los modelos Golf y Tiguan, amenazaba con generar pérdidas, según un comunicado separado.
La empresa está planeando cerrar al menos una fábrica de automóviles más grande y una planta de componentes en Alemania, afirmó, además de abolir los acuerdos salariales.
VW emplea a unos 650 mil trabajadores en todo el mundo, casi 300 mil de los cuales están en Alemania. La mitad de los puestos en el consejo de supervisión de la empresa están ocupados por representantes laborales, y el estado alemán de Baja Sajonia -que posee una participación del 20 por ciento- a menudo se pone del lado de los organismos sindicales.
Los enfrentamientos anteriores terminaron o acortaron los mandatos de altos ejecutivos, incluido el ex director ejecutivo Bernd Pischetsrieder, el ex director de la marca VW Wolfgang Bernhard y más Herbert Diess, el predecesor de Blume como director ejecutivo. Los tres intentaron impulsar eficiencias, particularmente en las operaciones nacionales de VW en Alemania.