22 mil muertos en lo que va del sexenio

“Cada vez queda más claro que esta estrategia está mostrando sus límites y que la violencia va a seguir incrementándose”, dijo José Antonio Crespo, analista del privado Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).

Y es que en lo que va del sexenio de Felipe Calderón, la narcoviolencia ha cobrado la vida de mas de 22 mil personas; el 92% fueron ejecuciones, según un informe entregado ayer al Senado de la República.

Tan sólo en los primeros meses de este 2010, la cifra de muertos alcanza los 2 mil 904 muertos, y si se sigue a ese ritmo, en el primer semestre podría acercarse al total de víctimas del año pasado.

El documento entregado en calidad de confidencialidad, al que tuvo acceso el diario Reforma, considera al 2009 como el año más violento, con 8 mil 928 muertos y la lista la encabeza Chihuahua, a ella le siguen Sinaloa, Guerrero, Baja California y Michoacán.

De todas las muertes, mil 715 cayeron en enfrentamientos y 160 murieron como consecuencia de una agresión.

En la lista de los municipios más violentos se encuentran Ciudad Juárez, seguida de Culiacán, Tijuana, Chihuahua y Gómez Palacio.

Algunos analistas manifiestan que si bien la actual administración logró la captura de algunos líderes de estas bandas, la violencia no cede.

Mientras para Calderón sus antecesores permitieron que los narcotraficantes se metieran “hasta la cocina” y que la actual espiral de violencia se debe a su decisión de enfrentarlos, otros creen que el problema es que los operativos se lanzaron sin una estrategia de combate a las estructuras logísticas de transporte de drogas, a la corrupción en los distintos niveles de Gobierno y a la falta de una reforma judicial de fondo para darle más poder a jueces y fiscales.

Edgardo Buscaglia, especialista del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), asegura por su parte que “están aplicando únicamente técnicas represivas con el Ejército y una policía federal corrupta”.

Además de las muertes derivadas de la narcoviolencia, en los últimos tiempos las denuncias contra militares por abusos han crecido.