Cesar Duarte avanza su estrategia y sigue sembrando discordia

Mientras el Gobernador de Chihuahua se sigue endeudando, sin que nadie lo detenga ni ofrezca una verdadera oposición a sus acciones (visualicese PAN tomando la tribuna del Congreso para evitar endedudamiento o haciendo algo más efectivo), este junto a otros dos gobernadores se están convirtiendo en la manzana de la discordia que impide la reconciliación en México.

Señalados como corruptos y abusivos por sus excesos, pero ahora cínicos y desvergonzados por lo que están haciendo antes de dejar el poder, sin que nadie se los impida, los goberandores Cesar Duarte de Chihuahua, Javier Duarte de Veracruz y Roberto Borge de Quintana Roo, están dando una lección de como inmovilizar a su oposición.

Ayer mismo los tres líderes nacionales de los partidos PRI, PAN y PRD; se lanzaban sendos comunicados, llenos de adjetivos calificativos para llamar la atención, emitiendo posturas sobre lo que están haciendo estos gobernadores, convirtiendo el escenario en un lugar de pirotecnia política que al final de cuentas a nadie le sirve para nada, ni favorece en algún avance real.

En Chihuahua lo que ocurrió esta muy claro, el Gobernador Cesar Duarte, ha hecho lo que ha querido, sin que la oposición pueda detenerlo.

Primero avergonzó públicamente a los líderes de una manifestación infiltrada, donde trascendió que agentes policiacos estuvieron azuzando a los manifestantes para que tiraran la puerta del Palacio de Gobierno, haciendo ver como rijosos a los manifestantes.

Que pasó después?, nisiquiera después, todavía no terminaba la manifestación cuando el PAN (Mario Vasquez) ya se estaba deslindando de los líderes, dejando solos a sus propios diputados, Rogelio Loya y Ana Lilia Gómez, y a otros personajes a pesar de que fueron sus alianzas en campaña.

Con eso bastó, después todo fue para adelante, para empezar se detuvo el tema del adeudo millonario (y en dólares) del gobernador con una empresa española, el cuál presuntamente sería pagado con recursos del erario público, escándalo que pasó a segundo término ante los destrozos de la "histórica" Puerta derrumbada frente al Palacio.

El terreno también estaba listo para un nuevo endeudamiento, pero el show debía continuar.

Un cerco de seguridad en el Palacio y el Congreso, para hacer rabiar a la oposición, pero a la vez infundir temor, unos diputados priistas envalentonados, viendo el resultado del abandono del PAN a sus compañeros y, sobre todo, unas cuentas pendientes que estaban ahí, esperando dinero para saldar los gastos de las campañas políticas, más aún cuando en la derrota, difícilmente habría otra oportunidad para saldar.

Chihuahua pues tiene hoy seis mil millones más de deuda, prácticamente esta tronado por los próximos años, por lo menos el tiempo en que gobernará Javier Corral, para quien gobernar responsablemente significará pagar deuda porque no hay de otra y hacer un gobierno austero, aunque el estado sea rico en recursos.

También en Chihuahua todo esto ha generado la desvergonzada desfachatez de un gobierno amenazante y represor, ante la timorata y complaciente actitud de una oposición cobarde, débil y poco efectiva, o por lo menos así lo han establecido los hechos, la realidad.

Para ilustrar más el escenario, basta informar a la gente que de otros partidos minoritarios estaban dispuestos a votar en contra de la bursatilización, pero no hubo quien les llamará para hacer una alianza (negociar) en favor de Chihuahua, con excepción del PRI, partido que chantajeo con lo del salario de los burócratas y pensionados del estado y listó.

Curiosamente estos mismos hechos se están replicando en Veracruz con Javier Duarte y en Quintana Roo con, Roberto Borge, donde ambos mandatarios han logrado sus objetivos y se preparan para seguir blindando su salida del poder, aunque sus acciones sean un reflejo de autoritarismo, anti-patriotismo y traición a la patria, al fin de cuentas nadie hace anda efectivo para detenerlos.