Compromisos que dejan huella

Partiendo del derecho que tenemos todos a diferir o criticar las acciones que emprende el Gobierno Federal para resolver los múltiples problemas que nos aquejan, también con toda honestidad debemos reconocer lo que se hace bien.

Yo siento que el país avanza a pasos gigantes en muchas áreas del quehacer gubernamental o el servicio público. Menciono solo dos. Una es el reciente compromiso en el plan anticrisis que revela un gran tino al tratar de proteger el empleo, favorecer el crédito a la infraestructura, apoyar las pequeñas y medianas empresas, etc. No necesitamos ser brillantes economistas para saber que mientras el empleo esté protegido las posibilidades del país para defenderse de una crisis mayor son alentadoras, precisamente porque con empleo hay crecimiento, ahorro y en muchos casos inversión en pequeños negocios. Con trabajo e ingreso se resuleven muchos problemas, cada quien en su nivel, sin esto, la caída es paulatina hasta entrar en situaciones de crisis, que luego saltan a crisis sociales y políticas. El apoyo a la infraestructura y a las empresas para que se mantengan con vida es una buena columna vertebral que mantiene al país en pie. Favorecer condiciones solo para los ricos nos haría terminar en una nación de pobres y ricos. Sin esa columna de apoyar lo de enmedio que nos mantiene bien paraditos, somos candidatos al fracaso.

El acierto de este plan está en lo bien que ha sido recibido por el sector empresarial, los industriales y la vida institucional de México. Por supuesto, que también ha tenido críticas válidas y eso es normal.

Otro de los grandes éxitos es el relativo a las acciones contra el narcotráfico. Aunque en ocasiones los ciudadanos nos dejamos infuenciar por la gran confusión que provoca la crítica vengativa y no profesional, que viene de medios de comunicación con consigna o de parlmentarios mas leales a sus partidos que a la sociedad a la que se deben.

No entraré en mayores detalles sobre esta batalla que es uno de los grandes logros del Gobierno Federal. Solo mencionaré dos argumentos sencillísimos. Escuchaba en la radio del secuestro o confiscación de mas de doscientas avionetas, aviones... que le han sido decomisados a los narcos. Imagine usted cuanto daño significa eso en lo que ha distribución aérea de droga se refiere. Vea de que tamaño es nada más este golpe. A ese súmele el decomiso de armas, drogas, descubrimiento de plantíos, detención de capos líderes...; EL QUE NO VÉ ES EL QUE NO QUIERE VER.

Otra observación importante, que personalmente me molesta un poco es cuando alguien dice, sin fundamento, que estamos perdiendo la guerra contra los capos. Ni es cierto lo anterior y además en caso de que así fuera la guerra no la está perdiendo el Gobierno sino los mexicanos.

Sumemos pues a nuestra crítica acciones de compromiso para resolver problemas. A sacar menos lana del ombligo y a trabajar mas por nuestro país.