Presidencia no presionó a obispos de Chihuahua

Esta noche la Presidencia de la República desmintió categóricamente el supuesto hostigamiento a los Obispos de Chihuahua, por parte del secretario particular del Presidente, Luis Felipe Bravo Mena, el cuál fue difundido en diversos medios de comunicación.

Lo anterior ocurrió luego de que varios medios publicaron un supuesto hostigamiento de la Presidencia de la República, por haber apoyado al Gobernador del Estado.

El señalamiento indicaba que Luis Felipe Bravo había hablado con cada uno de los obispos de Chihuahua para recriminarles haber respaldado al Gobernador del Estado, frente a la situación que priva en el estado en materia de inseguridad y durante la crisis generada por al detención del candidato del PAN a la diputación del 6to. distrito Juan Blanco.

Incluso hoy el propio Gobernador, José Reyes Baeza, reprobó públicamente que esta situación se haya dado, tras la supuesta denuncia pública realizada por el obispo de la Diócesis de Parral, Don José Andrés Corral Arredondo.

Ante tales hecho hoy la Presidencia de la Republica envió un boletín que publicamos en forma íntegra para evitar especulaciones, donde se hace evidente que ni siquiera la Presidencia ha tenido comunicación con el Obispo de Parral en los últimos días:

Texto difundido por la Presidencia:

En referencia a las notas que se publican el día de hoy en diversos diarios del Estado de Chihuahua, sobre las declaraciones del Obispo de Parral, Monseñor José Andrés Corral Arredondo, hacemos las siguientes precisiones:

Negamos categóricamente dichas afirmaciones y suposiciones hechas por el Obispo de Parral. El Secretario Particular del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, licenciado Luis Felipe Bravo Mena, no ha tenido conversación alguna con Monseñor José Andrés Corral Arredondo.

El licenciado Luis Felipe Bravo Mena mantiene comunicación cotidiana y permanente con diversos actores políticos y sociales, en cumplimiento de sus funciones. Entre ellos, en semanas anteriores, conversó con Monseñor Renato Ascencio León, Obispo de Ciudad Juárez; Monseñor Guillermo López Soto, Obispo de Cuauhtémoc-Madera y con Monseñor José Fernández Arteaga, Arzobispo de Chihuahua, con quienes intercambió puntos de vista sobre temas de interés para la entidad, como el de la terrible inseguridad que azota al estado.

En dichas comunicaciones, el Secretario Particular les reiteró su invitación a tomar un café en cuanto se presente la oportunidad, como lo hace con otros prelados en todo el país.

El licenciado Luis Felipe Bravo Mena lamenta que conversaciones privadas sean divulgadas por terceros de manera dolosa y tergiversada.