Sábado 10 de noviembre de 2007
En Tabasco, se forman brigadas sanitarias para prevenir brotes infecciosos y un censo para la reconstrucción de viviendas
En Tabasco, se forman brigadas sanitarias para prevenir brotes infecciosos y un censo para la reconstrucción de viviendas
La emergencia en Tabasco no ha terminado, pues al bajar el nivel del agua, se inicia una etapa muy delicada para los tabasqueños, toda vez que se tienen que prevenir posibles brotes de infecciones, para lo cual la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en coordinación con la Secretaría de Salud (SS) integran brigadas para fumigación en aire y tierra, así como para vacunación de la población.
Luego de un recorrido de supervisión en una de las zonas más afectadas por las inundaciones en Tabasco, la titular de la Sedesol, Beatriz Zavala Peniche, informó lo anterior y señaló que tal y como lo instruyó el Presidente Felipe Calderón se puso en marcha un plan de jornadas sanitarias para evitar surgimientos de dengue, que incluye el verter cal en toda agua estancada y donde haya animales muertos.
Precisó que a los ciudadanos que participen en las brigadas se les pagará por medio del Programa de Empleo Temporal Inmediato (PETI), que empezó a funcionar desde los primeros días de la emergencia con
20 millones de pesos, para que tengan un ingreso quienes han perdido su fuente de trabajo por la situación que se vive en Tabasco.
Señaló que se está exhortando a las personas para salgan de sus casas anegadas y se trasladen a los albergues para que reciban atención médica y no pongan en riesgo su salud, o en su caso extremen precauciones, pues conforme va descendiendo el nivel del agua se incrementa el riesgo de infecciones. Indicó que de acuerdo con datos del gobierno local, son casi 800 los albergues instalados en la ciudad, aunque detalló que se pretende que los más grandes, como el de la Marina, concentren a más personas pues tienen garantizados los alimentos y servicios.
Por lo anterior, la funcionaria federal dijo que la Sedesol sigue teniendo como prioridad el coordinar la operación de los albergues, donde se atiende a más de 70 mil personas, y verificar que los damnificados tengan las condiciones mínimas para vivir mientras regresan a sus casas, mediante la dotación de ropa, alimentos, artículos de limpieza y de higiene personal, así como la instalación de regaderas, lavabos y cocinas.
Afirmó que Diconsa está repartiendo entre los damnificados un total de 250 toneladas de víveres provenientes de las donaciones de la población y diversas organizaciones y diariamente se integran 30 mil despensas, con lo cual se garantiza el abasto de productos básicos durante esta emergencia.
Agregó que ahora que ha empezado a descender el nivel de agua, se comenzarán a conocer los primeros resultados de inspección y evaluación de daños en vivienda e infraestructura, por lo que, indicó, será en las próximas semanas cuando la Sedesol esté en condiciones de informar sobre la magnitud de las afectaciones e iniciar la estrategia de ayuda tanto en reconstrucción o construcción de casas como en la reposición de enseres domésticos.
Detalló que en esta fase de recuperación, lo primero será hacer un censo para cuantificar los daños en vivienda para los programas que tiene el Gobierno Federal en la materia, como el Programa Hábitat que hasta el momento cuenta con una reserva de 600 millones para vivienda o el de Reposición de Enseres Domésticos con una reserva de 400 millones de pesos.