Domingo 9 de mayo de 2010
Signos de desesperación se perciben en quienes pensaron que nomás porque así lo manda mamá Paredes
Signos de desesperación se perciben en quienes pensaron que nomás porque así lo manda mamá Paredes
Sube el color de las campañas, a unas las observamos mostrando la tranquila limpidez de un abierto cielo azul, mientras que a otras las vemos palidecer al pasar del rojo encendido al rosa pálido... y últimamente ponerse blancos… como cuando la preocupación hace huir el color de las mejillas de quien está pasando apuros.
Signos de desesperación se perciben en quienes pensaron que nomás porque así lo manda mamá Paredes, su candidato impuesto desde las cúpulas iba a tener la aceptación automática de la ciudadanía chihuahuense, es más, ni siquiera la tiene dentro de las filas de su partido, pues a ese respecto debo confesar – no sin democrático regocijo – lo que se oye a nivel popular, ya sea en los tianguis que proliferan por nuestra capital, ya en los lugares públicos o en eventos donde se propicia la reunión.
“No comadre estos si que ya ni la friegan, cada vez se vuelven más cínicos y descarados, mire que el burro hablando de orejas, el César ese dizque reclamando resultados, ¡pós si son de los mismos!, yo por eso ahora sí, los voy a mandar a la fregada y eso que siempre he sido de hueso colorado, bien jaladora con ellos, (comentario recogido al pasar apenas este domingo anterior por ahí por “Suelo Vista Mall” (vulgo los tiraderos de San Jorge), lástima que la censura impida transcribir tal cual fue pronunciada, la florida catarata de adjetivos y comentarios con los que la segunda comadre reforzó los argumentos de la primera, ya ven que condimentada se ponen la plática cuando empieza con un censurado “ Si comadre, usté mándelos mucho a ... ¡PRIiiiii! , porque son unos hijos de ... ¡PRIiiii!, yo por eso también, que vayan ... ¡Ah chi...huahua, como puede ser expresivo el lenguaje popular! Qué bueno que la gente hable y aunque muy a su manera, exprese su postura respecto a quien así se la haya merecido, porque si estamos de acuerdo en que el silencio es una forma de complicidad, la gente de Chihuahua ha entendido que ya basta de complicidades silenciosas y pasivas porque; ¡ha llegado el momento de hablar, bien claro y bien fuerte al dar un voto que signifique:¡Basta ya, no queremos más de lo mismo!
Que si algunos acostumbrados al poder y a sus PRIvilegios, consideran esto una falta de respeto y hasta lo catalogan de “guerra sucia”, habrá que aclararles que el respeto es algo que se tiene que ganar y por supuesto que después de la forma como se han desempeñado, no es precisamente respeto, ni aplausos lo que dan ganas de dedicarles, quizá por estar tan cercano el diez de mayo, la fecha influya en los pensamientos de la gente cuando pensamos como manifestarles nuestra inconformidad, ¿O qué ya se les olvidó que cuando tomaron protesta del cargo dijeron “Juro cumplir y hacer cumplir... y que si no el pueblo me lo demande”, pós no cumplieron y por eso ¡ahora se aguantan... Demandados están!
Y hablando de hablar: (algunos es lo único que saben hacer), el ya no tan flamante candidato PRIcolor, ya no siente lo duro sino lo tupido y nos pone a pensar... pero no en la forma que él quiere que pensemos, pues cuando lo vemos dar tumbos erráticos y reconsiderar sus propuestas al intentar plagiar las del otro candidato, nos revive el recuerdo de aquellas clases de lógica elemental donde se enuncia este axioma: “varías, luego, mientes”. ¿Pós no qué no?, ¡claro que la derogación del cobro de la tenencia y el abaratamiento de las placas de circulación es posible!, pero no sólo de ahora, sino que desde hace mucho tiempo, más existe una verdad oculta por lo que no ha sido aplicado por los priístas ese beneficio a la población.
Juzgue usted: existe una partida presupuestal, asignada por la federación que haría innecesario ese impuesto en nuestro estado porque cubre ese rubro con el que los gobiernos del estado de extracción priísta han justificado el alto costo de estos trámites, pero a propósito han cometido un sub-ejercicio de ese recurso, pues resulta que si toman ese dinero que por ley nos corresponde, ya que es un mecanismo normal de redistribución de nuestras aportaciones a la federación través de los impuestos, más como esas partidas vienen etiquetadas y son auditables, el gobierno estatal tendría que rendir cuentas detalladas del uso que se le de a esos dineros, incluyendo transparencia en las licitaciones de asignación de obra y es ahí donde estos DELINCUENTES se resisten a aplicar ese presupuesto.
Porque entonces las compañías constructoras de la familia Baeza, la de Alejandro Cano, las de los presta-nombres de Patricio Martínez e inclusive la de César Duarte ya no podrían ni siquiera concursar y quedarían fuera de la jugada, PORQUE LA LEY PROHIBE QUE UN FUNCIONARIO DE GOBIERNO SE CONVIERTA EN PROVEEDOR DEL MISMO GOBIERNO EN EL QUE SE DESEMPEÑA. Ley que estas administraciones se han pasado por el arco del triunfo hasta hoy impunemente y por ello se han servido con la cuchara grande bajo el pretexto del servicio público.
En un desesperado intento por repuntar en su caída de popularidad, Duarte A-P-A-R-E-N-T-E-M-E-N-T-E, hace suya esta propuesta, pero como tiene claro que a él y a su grupo de ninguna forma les conviene eliminarla, preparan el terreno del incumplimiento y a través del diputado Neaves (otro en la jugada), plantan desde ya un precedente de pretextos legaloides con supuestos artículos transitorios que impedirían la aplicación de dicha derogación, por lo que llegado el caso nos saldrían con una hipócrita disculpa de “Que lástima, yo si quiero, pero la ley me lo impide, mejor vamos a hacerle de otra forma”. Mienten, ¡sí se puede!
Démosle gracias a quien haya que darlas, por la evidente torpeza con la que se manejan y por su aún mayor ingenuidad al considerarnos a la ciudadanía tan ignorantes como para seguir creyéndoles sus lágrimas de cocodrilo. Lagrimeos tan falsos como cuando Duarte sale en su promocional diciendo: “Me duele mucho la situación por la que estamos pasando” ¿y le dolía igual cuando su partido hacía convenientes “alia-tranzas” con los cárteles de la droga, de secuestradores, ladrones de autos, tratantes de personas y otras formas de delincuencia a los cuales dejaron crecer hasta este grado de poderío con el que ahora desafían e intimidan a la sociedad entera? Usted y yo conocemos la respuesta.
Y, ¿cuál fue la respuesta que ellos dieron al problema de aumento en los índices de delincuencia? ¿Cómo enfrentaron esos incómodos datos por los que inclusive algunos organismos internacionales empezaron a presionarlos?, pues simplemente pusieron a funcionar un recurso que dominan, - aunque ya no a la perfección: El recurso de la simulación, para eso se sacaron de la manga su estrepitosamente fallido Nuevo Sistema de Justicia Penal, en el que todas las denuncias que pretendemos interponer usted y yo simples mortales, ya no son consideradas procedentes, simplemente porque ahora ya nada es delito y por lo tanto ya no se puede abrir un expediente que incremente la cuenta a la hora de las cifras, consecuentemente se abate (cuando menos en teoría) el índice de criminalidad. ¡Y mira que suave, aquí no pasa nada y todos vivimos muy felices en el fantástico mundo de Reyeslandia! - simulación - ¿Será?
Y ya que hablamos de simulaciones hechas y otras por hacer; ¿qué se esconderá detrás de la propuesta Duartista de crear una policía única’, (disculpen la desconfianza, pero “la mula no era arisca...”), no hace falta mucha imaginación para deducir que el verdadero interés, no es el de proporcionarle seguridad a la población, sino proporcionarse seguridad ellos mismos, como lo han hecho con la tan cacareada CIPOL, otro de los fracasos institucionales del sistema estatal que a poco de fundada demostró estar infiltrada hasta el tuétano por el poder corruptor de la delincuencia y tuvo que empezar a ser depurada y supervisada por el ejército para devolverle efectividad. Este es un proceso que no se ha completado a cabalidad y amenaza con resurgir magnificado si no se completa la purga de malos elementos. (Como cuando hay una recaída en la gripe que después se agrava la infección).
La ambición que caracteriza a este grupo que pretende perpetuarse en el poder, ahora disfrazado tras la rubicunda faz de su candidato, es – como si lo estuviera viendo – tener el control total, estilo Patriciato, de los asuntos de seguridad en el estado, ya sin oposición funcional, expulsar a la federación y convertir (aún más) a nuestra entidad en el refugio de los cárteles delincuenciales bajo el protectorado de un gobierno del estado de doble moral y doble función. ¡Dios nos proteja de que llegue a realizarse esa versión “recargada” de una nefasta CIPOL cuyo desempeño ya de por si ha resultado de tan pobres resultados... Al menos así lo ha sido para la ciudadanía a la que debieran satisfacer porque para ello deben aplicarse los impuestos que aportamos, en cambio los que han obtenido beneficio de toda esa infraestructura, son aquellos a los que se les brinda protección cipoliaca (perdón) policiaca, para que puedan continuar delinquiendo.
Preocupantes cuestiones que deben contar a la hora de tomar decisiones, pues en esta ocasión tenemos que ser muy analíticos y responsables a la hora de otorgar nuestra confianza a quienes manejarán los destinos de nuestra tranquilidad, habremos de ser muy cuidadosos y ver en manos de quien depositamos la tranquilidad de nuestras familias y no permitir el regreso de los que hasta ahora hemos logrado ir replegando a base de tanto esfuerzo dolor y sacrificio de nuestra gente.
En otro asunto, la bravuconada de solicitar un debate público con su oponente, revela la necesidad de C. D. J. de colgarse de la popularidad hasta ahora obtenida por C. B., sabiendo Duarte que su virtud predominante es el hábil uso de la demagogia, (perdón) de la lengua, quisiera tener la oportunidad de lucirse en lo que considera sus terrenos, alguien que no fuera de su desesperado equipo de campaña debería avisarle que ya de palabrerío estamos hartos, para que no siga enrareciendo el ambiente electoral con distracciones que a nadie benefician... ni siquiera a él.
Pero no todo es seriedad y preocupación en las campañas, nuestra condición nacional, alburera y picante, aporta su chispita. Los respectivos equipos de campaña, procuran retroalimentar su ánimo con frases ingeniosas y ocurrencias, transformando sus angustias en chistoretes locales y así vemos que cuando a los del PAN se les ocurrió bautizar al camión azul como “El Intumbable”, a los del PRI se les ocurrió bautizar al autobús rojo como “El Tumbaburros”, en clara alusión prosódica al apellido de Borruel a quien coloquialmente nombran “burro – el”, pero como esta es una fiesta pública y todos somos invitados, al fin mexicanos irreverentes y maloras, ya empieza a correr otro chiste, inspirado en una mezcla de dos frases populares: Una que dice “Caballo que alcanza gana” y la otra más mal intencionada que sentencia: “cien burros te correteen... y el más veloz te alcance”, las implicaciones son altamente “coloradas” por lo que para no pecar contra la decencia que debe existir en los medios, eliminemos las “peladencias explícitas” y dejemos todo a la cochambrosa imaginación de “la raza”. La premisa para las deducciones es... “se me hace que ese Burro - el... ¡ya los alcanzó!” je, je, je. Se los dije PRImero, hasta luego. ¡Sean felices!